sábado, 16 de mayo de 2009

Aviso: Haz caso de este Aviso

La naturaleza es sabia. Nuestro cuerpo es sabio. Y no digamos nuestro cerebro. Nuestro cerebro tiene tanta información sobre nosotros mismos que casi no le cabe.Llegó tarde a casa después de estar todo el día en el Instituto dando clases. Últimamente estaba cansada, fatigada. Preparó la cena y, al mismo tiempo, la comida del día siguiente. Bañó a los niños, les ayudó a hacer las tareas, los acostó y, de repente, notó algo en el brazo izquierdo. Un fuerte dolor en el pecho acompañado de un mareo. Ambulancia, urgencias, hospital. El médico le dice que tiene que tomarse la vida con más calma y que tiene que adelgazar 35 kilos. Su cerebro ya le había avisado antes.Tiene once años y va muy bien en la escuela. Es un chico muy listo, trabajador, cariñoso. Pero un día, su madre se da cuenta de que ha desaparecido un billete de cinco euros que había dejado encima de la mesa. “Me habré equivocado”, pensó. Pero al día siguiente echa en falta un billete de diez euros que tenía en el bolso. Hasta que descubre que su maravilloso hijo está quitándole dinero. Llevaban casados diez años y tenían dos hijos de 8 y 5 años. La relación de pareja se había ido enfriando poco a poco. Ya ni siquiera tenían relaciones. Hasta que un día, él le dijo que se sentía muy mal, abandonado.Miedos superados que vuelven, respuestas de ansiedad, depresiones, le despiden de todos los trabajos, las amistades le rehúyen, no aguanta a su familia, se enfada con todo el mundo, tiene momentos de ira, empieza a tener una úlcera, no se aguanta a si mismo, un amigo le dice que está insoportable, el jefe le amonesta por no cumplir su trabajo, tiene un amago de infarto, su pareja le dice que necesita tiempo, tiene diez años y vuelve a hacerse pis, comienza a ir mal en la escuela, pierde a todos sus amigos, se fuga del colegio, vagabundea por las calles, ha comenzado a fumar marihuana, tiene una crisis de angustia… Todo lo anterior son ejemplos de avisos de que algo no va por donde tiene que ir. Podemos mirar hacia otro lado, hacer como que no nos enteramos, pero en el fondo todos sabemos que, o reaccionamos ante esos avisos, o algo más grave va a suceder. Son lucecitas rojas que se encienden, que parpadean, que se nos muestran como evidencias de que tenemos que hacer algo diferente.Si la profesora no cambia su alimentación y su estilo de vida, si la madre no se da cuenta de que algo le pasa a su hijo, si la pareja no se entera que así no pueden seguir, las cosas acabarán mucho peor. Nuestro cuerpo nos avisa. También nuestro cerebro nos avisa.Aviso: Haz caso de este aviso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario