domingo, 11 de julio de 2010

8 indicadores de tu situación financiera

Existen "señales de advertencia" a las que se debe prestar atención para hacer correcciones, porque de lo contrario, se tendrán problemas financieros. Toma nota y analiza si te encuentras en el camino correcto.

Todos hemos olvidado pagar las cuentas a tiempo o cargamos en las líneas de crédito más gastos de lo que deberíamos.

Existen algunas “señales de advertencia” a las que se debe prestar atención para darse cuenta de que en caso de no hacer correcciones, se tendrán problemas financieros. Si bien algunos signos de alerta son una fórmula probada, desde el revés económico y la volatilidad del mercado de los últimos años, es mejor estar preparados para todo tipo de eventualidades.

Como siempre estamos preocupados por tu salud financiera y próspero éxito empresarial, aquí te entregamos un listado de indicadores que te servirán para analizar si te encuentras en camino a las dificultades financieras y para saber qué puedes hacer para solucionarlas. Anota y prepárate:

1. No tienes ahorros para emergencias
La regla general recomendada indica que dicha reserva debe contar con el equivalente a 3 ó 6 meses de tus ingresos. Ésta debe ser resguardada en una cuenta corriente o de ahorros.
Sin ahorros, tendrás mayor probabilidad de generar una deuda con la tarjeta de crédito potencialmente difícil de cancelar en caso de que se presente alguna contingencia.

2. Sueles pagar las cuentas con recargos y multas
Saldar habitualmente las deudas con demora es un indicador de que tus ingresos no son suficientes para solventar tus gastos regulares, o que no cuentas con un sistema de cancelación de facturas que funcione para ti. La demora te puede costar no sólo dinero y tiempo, sino que puede generar un bajo puntaje de crédito porque los acreedores comunican los retrasos en el pago a la mayoría de las oficinas de crédito y esa información se agrega a tu informe crediticio, lo que significa que tendrás menor probabilidad de que te aprueben algún préstamo en el futuro.

Organiza tus pagos y crea un sistema para cancelar tus facturas.

3. Posees impuestos vencidos e impagos
El retraso en el pago de impuestos puede comenzar a raíz de algo, en apariencias manejable. Sin embargo, finalmente deberás arreglar cuentas con el gobierno y tendrás que sufragar tus impuestos o enfrentar un juicio penal. Si sabes que adeudas impuestos, una buena idea es determinar la mejor estrategia para satisfacer la deuda pendiente y ponerse al día. Además, debes negociar un plan de pago o una reducción en los intereses y recargos.

4. No tienes un presupuesto
Si no tienes claro cuánto debes y tampoco cuentas con un plan bien ideado para saber cuánto gastarás, es muy probable que malgastes fondos, generes deuda y no ahorres e inviertas para las metas financieras futuras. Es mejor que comiences con la elaboración de un presupuesto que funcione para ti.

5. Pesan gravámenes sobre tu inmueble
Un gravamen es un reclamo legítimo que alguien puede presentar contra tu propiedad o tus bienes para cerciorarse de que devuelvas el dinero que adeudas. Los gravámenes son perjudiciales para tu informe de crédito porque disminuyen tu puntaje crediticio, lo que afecta su capacidad para obtener términos de financiación atractivos. Si te enteras de algún gravamen constituido sobre tu propiedad o bienes, contacta a quien lo haya interpuesto para crear un plan de pago, liberar el gravamen y quitarlo de tu informe de crédito.

6. No revisas los documentos financieros
La información que recibes es importante y debes estar al tanto de lo que dicen esos documentos. Debe saber si las cuentas son precisas y si los términos de tu préstamo o tus inversiones han cambiado. La información es la única herramienta que tienes para adoptar decisiones sabias sobre cómo efectuar modificaciones para seguir adelante y decidir si quieres hacerlas.

7. Te rechazaron un préstamo
Si has solicitado una tarjeta de crédito o un préstamo y no te los otorgaron, es muy probable que tengas un puntaje de crédito demasiado bajo. Esto significa que el prestamista tiene motivos para creer que representas un riesgo de crédito. En otras palabras, duda de que tengas capacidad o intención de cancelar el préstamo. Preocúpate por mejorar tu calificación crediticia.


No hay comentarios:

Publicar un comentario