viernes, 2 de agosto de 2013

¿Obligación o motivación?


¿Obligación o motivación?
Cómo hace para que sus empleados logren resultados? Es toda una pregunta, ¿no es así? Y sus variaciones: ¿cómo hace para que sus empleados logren más? ¿y mejor?, ¿o que tengan una mejor actitud?

La cuestión es movilizar a las personas, influenciarlas. Pero... ¿cómo hace para que las personas cambien sus pensamientos, creencias y acciones?

Como empleador o líder de una empresa, estamos generalmente auto-motivados y no necesitamos que nos digan lo que hay que hacer muy a menudo. Esto es muy bueno, sin embargo, puede volverse en contra nuestro cuando lideramos ya que esperamos que los demás hagan lo mismo... y cuando no lo hacen nos sentimos frustrados. Así es que -tantas veces- nos encontramos diciendo: "¿Cómo hago para que se muevan?"

La mayoría de nosotros, tendríamos la tendencia natural de responder "Bueno, ¿pero para qué les pago?" Caemos siempre en la creencia de que les pagamos un salario para dar todo, para que se desempeñen al más alto nivel y para que, además, lo hagan con una sonrisa! Básicamente, caemos en el paradigma de la OBLIGACIÓN. Están obligados a seguirnos, a hacer el trabajo, porque les pagamos. Antes de continuar, aclaremos que este hecho es totalmente cierto... sólo que no funciona! La obligación raramente funciona como motivador. Y, aún cuando logra que las personas actúen, hace que el espíritu sea dejado de lado. Y, al fin de cuentas, es nuestro espíritu el que controla nuestras acciones... Permítame mostrarle una mejor manera:

Mejor que la obligación es la MOTIVACION. Sí, al pagarles están obligados hacia usted, pero lo que realmente les moviliza y les hace tener una actitud positiva es la motivación. ¡Motive a su personal! No caiga nunca más en "... porque soy tu jefe y te digo de hacerlo". En lugar de esto, ayúdeles a motivarse. He aquí algunas ideas:
Primero, observemos que la raíz de la palabra motivación proviene de MOTIVO. De a las personas un MOTIVO para actuar. Enséñesle y comuníquese con ellas, una y otra vez. Apele a sus deseos más profundos, demuéstreles por qué es bueno para ellos cambiar o actuar... deles un motivo!

Segundo, recompense a su personal por un trabajo bien hecho". Pero, si les pago un salario. ¡Esa es su recompensa!" Esta en lo correcto. Pero también estará en lo correcto cuando cuelgue el cartel de "cerrado" en la puerta de su empresa. Un gran principio del management dice "lo que se recompensa se hace"... y es verdad! ¿Desea resultados? ¡Motívelos con una recompensa!

Tercero, mejore su relación con sus empleados. Los títulos y posiciones nos llevan a la obligación. Las relaciones a la motivación. Una persona que sirve a un frío y distante jefe se sentirá obligada. Una persona con una buena relación con su jefe se sentirá motivada.

Por último, cree una atmósfera motivadora en su lugar de trabajo. Usted puede motivar a las personas cambiando su ambiente, de la misma manera que puede hacerlo motivándoles directamente uno a uno.
Palabras claves: cultura organizacional, dirección participativa, lealtad a la empresa, estilo gerencial, estilo de dirección, incentivo, remuneración, premios y castigos, productividad, recompensa, recursos humanos, psicología del trabajo, autoridad, autoritarismo, legitimidad, jerarquía, obediencia, cadena de mando, mando y control, poder, persuasión, subordinación

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