Brainstorming – Tormenta de ideas Brainstorming, metodología creada por Alex F. Osborn, es una herramienta enfocada a la generación de nuevas ideas, conceptos y soluciones relacionadas a un tema específico, en un ambiente libre de críticas y de restricciones para la imaginación. Este método se denomina en castellano “Tormenta de ideas” o “Lluvia de Ideas”, siendo este un término igualmente arraigado en la literatura especializada. Esta tormenta o lluvia basa su poder en la libre expresión de ideas, sin limitación, juicio o miedo alguno priorizando y fomentando de esta manera la actitud creativa individual y colectiva.
Cuándo Utilizarlo La tormenta de ideas es ideal para aquellas situaciones donde se requiere una gran cantidad de nuevas ideas en el corto plazo, ofreciendo una gran cantidad de materia prima para el proceso de evaluación, combinación y mejora de estas nuevas ideas. Brainstorming puede ser usado para identificar:
Ideas
Sugerencias
Recomendaciones
Soluciones
Obstáculos
Causas del problema
Riesgos
Propuestas
Tareas a realizar
Temas
Oportunidades
Acciones
Estilo y Reglas Para asegurar la cantidad, diversidad y originalidad durante las sesiones de Brainstorming debe seguir estrictamente las cinco reglas:
Queda prohibido totalmente el emitir juicios. Cualquier tipo de juicio generará, especialmente en aquellos miembros del equipo más tímidos, miedo, temor o algún tipo de bloqueo mental.
La cantidad es importante: cuanto más, mejor, y mayor será la probabilidad de encontrar una idea realmente creativa, sea como una solución única o en combinación con otras.
Total libertad, la intención es dar alas a la imaginación, ninguna idea es lo suficientemente extraña para obviarla.
Combinar ideas durante la sesión es bienvenido. Cualquier miembro del grupo es libre de presentar nuevas ideas, que parten o se derivan de modificar alguna ya presentada.
Asegúrese que todo los miembros del grupo tengan igualdad de oportunidades para presentar sus ideas.
Cómo Utilizar la técnica El éxito de una sesión de lluvia de ideas depende, fundamentalmente, que cada participante entienda el proceso, sus funciones y responsabilidades. Este proceso consta de los siguientes pasos:
Identificación de la necesidad del Brainstorming: El primer paso del proceso de la lluvia de ideas es para asegurar que es realmente la técnica adecuada para solucionar el problema que enfrenta. La lluvia de ideas debe tener un propósito bien definido así como una clara percepción de los beneficios a generar por las ideas y las soluciones resultantes.
La selección del equipo: El siguiente paso es decidir quién va a formar parte del equipo, siendo el tema y el propósito del proceso los criterios más importantes para esta selección
Preparación de la sesión: El secreto del proceso creativo durante esta sesión es la preparación, empezando por algunas precauciones básicas
Generar ideas: La definición del problema y su presentación a los participantes es tal vez el elemento clave de todo el proceso, y uno de las más subestimados. Describa el problema y dedique el tiempo necesario para que todos los miembros del equipo sientan que han entendido el asunto al que se enfrentan, de esta manera evitará que el grupo tome caminos equivocados, perdiendo tiempo al tratar temas e ideas fuera del alcance definido. Una acción preventiva es el detallar en un folio de papel el problema y fijarlo a la pared frontal. En esta etapa se produce la generación y recopilación de ideas.
Elaborar y recopilar las ideas: Después de la fase inicial de la generación de ideas llega el momento para revisar, desarrollar y agrupar estas ideas para así facilitar el análisis. Esto permite igualmente al equipo identificar oportunidades para añadir nuevos puntos de vista o complementar algunas de las ideas. El proceso creativo no se limita a la etapa de generación.
Priorizar y seleccionar: Después de la agrupación y clasificación de las ideas generadas, es importante reducir el número de ideas a ser implementadas en el corto plazo para así canalizar y enfocar esfuerzos y recursos en aquellas con mayor potencial y viabilidad. Para ello es muy importante definir criterios consistentes sobre la selección de las ideas.
Al finalizar el proceso de priorización se recomienda reflexionar y evaluar los resultados obtenidos, poniendo a prueba los mismos frente a su intuición; ¿Son los resultados consistentes con los objetivos? Por último es muy importante mantener la motivación del equipo participante comunicando lo valioso que ha sido su contribución, en número de ideas o proyectos potenciales, y se le mantenga informado de los progresos obtenidos y el plan de acción. Le gustó lo que ha leído hasta ahora. Le invitamos a adquirir este interesante libro Extraído del libro “Creatividad Aplicada: Herramientas y técnicas para ser más creativo“
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