martes, 17 de septiembre de 2013

Salva tus ventas

Hay errores comunes que te harán perder clientela. Con estas sencillas acciones, evítalos y mejora la reputación de tu negocio. 
Imagina que eres un comprador más de tu negocio. Ahora piensa en las veces que atendiste a alguien de mala manera, no fuiste capaz de solucionarle un problema o simplemente lo ignoraste. ¿Te das cuenta ahora de cómo se sintió?
No te preocupes, siempre hay tiempo para aprender de los errores. Para ello, deberás adoptar prácticas de venta que se centren en el servicio al cliente y en respetarlo como lo que es: una persona, y no un medio para alcanzar determinados objetivos.
Recuerda que las estrategias con miras reducidas nunca podrán reemplazar tus esfuerzos por construir una empresa rentable con base en un auténtico compromiso con la clientela. Pon en marcha estas cinco estrategias para perfeccionar y proteger el prestigio de tu servicio… ¡y haz temblar a tu competencia!
Es común escuchar a un vendedor o representante pronunciar la frase “lo siento, ése no es mi trabajo”. Es molesto, ¿verdad? Entonces no repitas nunca esta acción y asegúrate de que tus empleados tampoco lo hagan. Todo lo que le ocurra a un cliente es tu responsabilidad, sin importar si está en la descripción de tus funciones o no.
Algunos vendedores suelen sólo seguir un guión en lugar de responder preguntas o resolver un asunto. Seguramente lo último que querrás de una compañía de cable es que, luego de tardar tres horas en resolver tu problema, intenten convencerte de contratar un servicio adicional. Nadie debe tratar de forzar la venta cuando un comprador esté enojado, aunque la computadora diga que hay que hacerlo.
3. Distingue entre lo bueno y lo correcto.
¿Has tratado de renegociar un acuerdo o cambiar un producto y te respondieron que no es posible? Técnicamente, la responsabilidad de la compra o de establecer un contrato es del consumidor; sin embargo, siempre te quedarás con la sensación de que la empresa no hizo lo correcto. Y lo primero que harás será contar a tus amigos tu horrible experiencia. Es en estos casos cuando la consideración hacia el cliente y tomarse el tiempo de entender cada situación individual convierte a las buenas compañías en excelentes.
4. Pon atención al consumo.
¿Cuántas veces has contratado o comprado algo que nunca usaste? En estos casos, seguramente te sentiste contrariado por haber malgastado tu dinero. No permitas que tus consumidores se arrepientan de haberte comprado o contratado y, cuando vuelvas a verlos, averigua si realmente están aprovechando tu producto o servicio. Tu éxito como vendedor depende de ello.
5. Sé absolutamente transparente.
Evita confundir a tus clientes con demasiada información o dejarlos aturdidos. Con tal de vender, algunos vendedores pueden soltar un discurso con un montón de conceptos confusos para encandilar. Olvídate de tecnicismos. No trates de impresionar y colócate en el nivel de la gente, sin importar qué tan simple te parezca. De esta manera podrías salvar una venta o, aún mejor, duplicarla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario